Para el puente de Andalucía pensé en hacer una escapadita para cambiar un poco de aires, y bueno, debió darme un aire extraño porque me apetecía mucho hacerlo en familia.
Y se me ocurrió además, comentárselo a E y S por si les apetecía venir y afrontar todos juntos este maravilloso plan con peques -medio suicida-. Y allá que fuimos todos en pandilla ignorando por completo las predicciones de lluvia que daban -que para las veces que se equivocan esta vez dieron en el clavo, cagontó-.
¿Sitio?
Nunca habíamos estado tranquilamente en Córdoba, paseando por sus calles céntricas, la Mezquita, la judería...ohhh qué maravilloso suena, qué poético entre sus patios colmados de flores, y sus calles empedradas -no aptas para carritos por cierto-.
Para los que no habéis estado nunca os recomiendo el sitio donde nos hemos alojado, los apartamentos
El Patio de Viana, un sitio céntrico, silencioso, con encanto, espectacular...
Nuestro apartamento era de dos plantas, con cocina, salón y aseo abajo, y arriba dos dormitorios -amplísimos- cada uno con su cuarto de baño completo. Lola e Inma nos trataron fenomenal desde el primer momento, la decoración sencilla y elegante, el parking está a la vuelta de la esquina, y el kit de desayuno completísimo. Vamos no pudimos quedar más encantados con la elección, un acierto total si váis con niños por Córdoba.
En fin, que no sólo sobrevivimos al suicidio entre perreta y perreta de mi gordi
-porque el bebé de mis amigos es bueno no, lo siguiente!-
sino que pasamos un finde de charloteo agustito y encima -es que nos va la marcha-
¡Nos quedamos con muchas ganas de volver!
¡Feliz día!
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